La pregunta que buscamos responder en este artículo es qué pueden hacer los Ayuntamientos, independientemente de su tamaño, para minimizar las consecuencias negativas de la presente pandemia.
La función de los Ayuntamientos no se limita a establecer mapas del delito o aplicar algoritmos que pronostiquen los ilícitos que sucederán en el futuro, sino que implica una tarea más compleja que es entender qué los motiva.
La mayoría de los gobiernos dedican su gestión a mejorar o incrementar lo ya existente. Pero son muy pocos los que crean, los que brindan servicios que antes no existían o, incluso, que no eran solicitados.
En este punto es importante conjugar dos instancias, por un lado las conclusiones que deriven del diagnóstico técnico del estado de situación de las distintas áreas que componen una ciudad y por otro lado las demandas de los ciudadanos.
En esta área, como en muchas otras, la gestión puede verse sensiblemente beneficiada por un trabajo riguroso con datos ciertos y trazables que permitan lograr el mayor impacto en los resultados con la menor afectación de recursos y generar un mayor compromiso ciudadano con los efectos de estas acciones.
Se propone que en la página web del Gobierno, los ciudadanos puedan acceder a una sección denominada “Estudio de mercado”. En la misma se brindaría toda la información necesaria para poder determinar la probabilidad de éxito de un emprendimiento. Incluso más, encontrar oportunidades de negocios a partir de los datos presentados.
Durante el mes de Febrero del año 2020, se realizó un sondeo de opinión a los alcaldes/as de localidades menores a seis mil habitantes de España.
Durante la última semana de marzo se realizó una encuesta en la Ciudad de Mercedes, con el objetivo de estudiar la percepción local respecto de la pandemia provocada por el COVID-19.
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